Pese a la baja ostensible de la matriz económica en la mayoría de los rubros, el mercado inmobiliario mantiene el ritmo de actividad y en particular en la proliferación de barrios periféricos en base a loteos privados.
«El tema de los loteos comenzó hace diez años tras el de Médano Verde en Claromecó y después con el San Agustín acá en la ciudad. Hay apuesta a proyectos distintos y novedosos. Se cuentan con una serie de lineamientos que pretendemos que se respete y otros vinculados al Código de Planeamiento, que impone solo el uso residencial», indicó Ignacio Pardo, de la inmboliaria homónima, en diálogo con Radio 3.
«Los créditos hipotecarios van trabajándose de a poco pero tranqulos, por lo menos hasta ahora», planteó sobre la compra-venta de inmuebles luego de ponderar que «hubo gente que no quería alquilar y el inmueble cerrado genera gastos, por lo que decidieron vender».
En tanto, y sobre los alquleres, el martillero apuntó que «el rentista ahora se anima y deja el inmueble en alquiler. Se puede contratar con ajustes más cortos y plazos menores de alquiler. La ley permite libertad pero siempre con el consenso de las partes: actualmente, se actualiza cuatrimestralmente con el Índice de Precios al Consumidor (IPC), que es el más parejo para todos».