Luego de que la secretaria de Agricultura de los Estados Unidos, Brooke Rollins, señalara que la Argentina “enfrenta un problema de fiebre aftosa ” por lo que comprará poca carne a nuestro país, desde el Gobierno por ahora se eligió el silencio y fue el campo quien salió a criticar la postura.
Todo surgió tras las declaraciones de que la funcionaria quien dijo que «no será mucha» la importación de carne argentina a Estados Unidos porque «hay un problema de aftosa», que afecta al ganado. La Argentina tuvo un último brote en 2006.
Ante el silencio oficial, el presidente de la Sociedad Rural Argentina (SRA), Nicolás Pino, aseguró que «la señora está mal informada» y recordó que en Argentina no tenemos ningún problema con esa enfermedad.
«A la señora habría que decirle que hace más de 20 o 30 años que, por suerte, en Argentina no tenemos ningún problema con esa enfermedad que tanto daño le hace a la ganadería. La verdad es que si no existe eso es porque trabajamos bien, de manera consciente. Entonces, vamos a creer que fue un comentario, que fue un error», insistió el titular de la entidad.
Cabe destacar que Argentina no tiene ningún problema ya que no presenta ningún brote desde hace 24 años.
Sin embargo, desde la oposición salieron a criticar la decisión del Gobierno nacional que en septiembre modificó el plan de vacunación contra la fiebre aftosa para la segunda campaña de vacunación en 2026.
(Con información de DIB)








