Los concejales del FpV, Martín Garrido y Graciela Callegari, plantearon que la medida de trasladar a los boliches de Claromecó a un sector específico deberá estar acompañada por un mejoramiento en los controles.
En contacto con Radio 3, resaltaron que se deberá consensuar medidas complementarias y normas de convivencia.
«Me preocupa el control: el tema del alcohol, la velocidad, la seguridad. ¿Quién se va a hacer cargo? Hay que tener normas y hacerlas cumplir. Es un tema muy complejo y entiendo que el intendente esté preocupado, pero es una decisión que hay que estudiarla», exhortaron.
Tras incluir también la cuestión de los cuatriciclos en la playa, observaron que aún no se conocen datos específicos de la iniciativa.
«Hay una diferencia entre los que alquilen y los propietarios: exigirle a un empresario que desmonte su boliche y lo haga treinta cuadras más allá, podría ser que algunos no puedan con los costos y deban cerrar», analizaron.







