El pasado 23 de diciembre, la localidad de San Francisco de Bellocq vivió una jornada cargada de emoción con el tradicional encendido del Árbol de Navidad. El evento, que se ha convertido en una cita ineludible para los vecinos, marcó el inicio formal de las celebraciones cristianas en la comunidad.
La actividad contó con un condimento especial: la recorrida de Papá Noel, quien saludó a los niños y niñas del pueblo, renovando la magia y la ilusión que caracteriza a esta época del año. Las familias se volcaron a las calles para compartir un momento de cercanía y alegría colectiva.
La organización estuvo a cargo de la Subcomisión de Reyes Magos del Club Recreativo Echegoyen, cuyos integrantes trabajaron para que cada detalle de la jornada contribuyera a fortalecer el espíritu comunitario. Desde la institución destacaron la importancia de sostener estos espacios que unen a las diferentes generaciones de Bellocq.
Esta celebración no solo sirvió para iluminar el centro de la localidad, sino también para reafirmar los lazos entre los vecinos, en un cierre de año que priorizó el encuentro y la felicidad de los más pequeños.













