La obra del «esqueleto» de Claromecó prosigue a paso redoblado, cumplidos seis años desde que se reiniciara la reconstrucción de la emblemática estructura que estuvo abandonada por más de cuarenta años.
A mediados de año, se culminó el apuntalamiento y hormigonado de los siete pisos comprados el 18 de octubre de 2017 por una firma porteña que también adquirió un terreno contiguo para locales comerciales y estacionamiento.
De acuerdo a lo informado por el ingeniero civil Nahuel Borcano, quien encabeza la recuperación y construcción de unidades habitacionales bajo la denominación Claros del Mar, se recupearon las columnas y vigas del frente.
Además, comenzaron con los trabajos de plomeria en el cuarto piso y el inminente desarrollo de las obras eléctricas durante noviembre; por otra parte, se concluirá próximamente con la impermeabilización de la azotea.
Para enero, se aguarda concluir con esas tareas para iniciar los contrapisos para evitar acumulación de agua desde la terraza hacia los pisos de abajo.












