La cosecha de trigo ya avanzó sobre más de la mitad de la superficie implantada con el cereal y acelera los trabajos de recolección de cara a lo que se será una de las peores campañas de la última década, debido a la sequía y heladas tardías durante momentos críticos de su desarrollo.
De acuerdo a la agencia Télam en base al último informe sobre estimaciones agrícolas a nivel nacional de la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR), se aplicó un nuevo recorte en la estimación de producción del cereal de 300.000 toneladas hasta las 11,5 millones de toneladas, volumen que de concretarse significará una caída del 50% respecto de las 23 millones de toneladas en la campaña anterior.
En diálogo con Radio 3, el referente de la Sociedad Rural Sebastián Tubía ponderó que el factor climático fue central en la problemática.
«Inclusive se da un porcentaje del 40% al 70%: en trigo, hay lotes con 800 kilos por hectárea, igual que la cebada que tiene hasta 1800 kilos por hectárea: generalizado, el rinde ha sido muy magro. Será una cosecha mala y complicada para el productor en materia de financiamiento. Hace falta agua urgente porque los cultivos presentan stress hídrico», lamentó.